Los Mossos d’Esquadra han denunciado a una mujer que a poca distancia de un control policial se cambió por el conductor, que tenía el permiso de conducir suspendido por orden judicial, aunque ella acabó dando positivo por alcoholemia, a un nivel penal, y por cocaína.
Fuentes policiales aseguran los hechos ocurrieron la madrugada del pasado domingo, 17 de agosto, en un control de alcoholemia que los Mossos d’Esquadra establecieron en el punto kilométrico número 3 de la C-16c, a la altura de Sant Fruitós del Bages (Barcelona).
Los agentes vieron que se acercaba al lugar un coche conducido por un hombre y que el vehículo se detenía y que la acompañante se ponía al volante. Los agentes sometieron entonces a la mujer al control de alcoholemia, en el que dio un resultado positivo de 0,73 -el límite penal son 0,60- y además dio positivo en cocaína.
Como es habitual en estos casos, en que los agentes comprueban que el conductor cambia su lugar en el vehículo por otro ocupante antes de pasar un control, los mossos también hicieron soplar al hombre, que dio un positivo de 0,54. No obstante, al comprobar sus datos, los agentes constataron que tenía el permiso de conducir retirado por orden judicial, por lo que ambos acabaron denunciados.