Rodin Eckenroth/Getty Images
La de Úrsula Corberó era una creación cubierta de lentejuelas blancas, con manga tres cuartos y escote caja que redibujaba la silueta de la actriz jugando con esos volúmenes surrealistas que tan bien ha sabido cultivar el diseñador irlandés a través de sus últimas colecciones para la firma.
Sin embargo, el factor sorpresa no termina aquí. Y es que como complemento al vestido, Corberó eligió un único elemento más. A saber: unos pumps blancos, también de Loewe, que incorporaban una de las siluetas que, sin duda, se convertirá en una de las apuestas de la próxima temporada. Y es que la punta redonda de los zapatos escogidos por Úrsula puede resultar para muchos rompedora, pero todo apunta a que más pronto que tarde se erigirá como la silueta de calzado más popular para acompañar a un buen tacón este 2025.
Monica Schipper