#5. Propuestas de seda lenceras: el slip dress nunca caduca
Con permiso de grandes diseñadores que supieron ver sus bondades en otros escenarios, desde que Carolyn Bessette-Kennedy se casara con un vestido de novia lencero, el slip dress, en realidad, nunca ha perdido su influencia. En las próximas temporadas parece reclamar su espacio, especialmente en la versión con cuello halter y todo apunta a que será muy buscado por las prometidas que se casan por lo civil. Su sencillez y sofisticación a partes iguales han cautivado a prácticamente todas las casas nupciales, españolas y extranjeras.
#6. Escotes que muestran los hombros
Stefano Ortega
Studio Bacci
Muchas de las novias Vogue de las que hemos contado su historia en 2023 ya apostaron por esta tendencia que realmente se mantiene en 2024. En las colecciones de Rime Arodaky, Rosa Clará y Cherubina es posible encontrar multitud de opciones para llevar esos escotes de novia que muestran los hombros: el off-the-shoulders, el barco, el Bardot o el bañera, entre otros. Diseños que resultan elegantes y que estilizan gracias al gesto de mostrar las clavículas, una idea que gusta tanto a las seguidoras de los looks de estilo princesa como a las menos preppy.
#7. Asimetrías, del cuerpo a la falda
Buscando poner una nota diferente o conseguir un efecto sorpresa, las asimetrías siguen siendo un recurso muy solicitado por las novias en 2024. Y las posibilidades de la tendencia son casi infinitas, como demuestran las colecciones: desde las mangas XL de Isabel Sanchís, hasta las espaldas arquitectónicas de Luis Infantes, pasando por las faldas de sirena de Monique Lhuillier o el escote con lazo de Silvia Fernández. No hay límites para este fenómeno que encaja en todos los estilos.
Andrew Jim
#8. Hombros arriba
Andrew Jim
Días de vino y rosas
Una de las tendencias que más estilizará esta temporada y que no tardaremos en ver en las próximas bodas es la de los volúmenes que ayudan a elevar los hombros. Pueden ser más evidentes o escudarse en los detalles de una manga diferente como la que nos propone Luis Infantes para sus novias de 2025.
#9. Un juego de texturas
Sidsel Alling
John Magcasi
Desde plumas a pequeños volantes, pasando por flores tridimensionales: los vestidos de novia de 2024 se atreven con un juego de texturas que hace de los diseños de la temporada algo muy especial. Podemos abrazar esta tendencia de manera minimalista, jugando con faldas o tops sencillos, o entregarnos al maximalismo con un look que jamás olvidarás.
#10. Mini vestidos de novia para bodas civiles y como segundos looks
A film love
Lo demuestran los datos de los buscadores y su éxito en las redes sociales: pocas novias renuncian a la magia de los mini vestidos de novia en 2024. Se han convertido en la opción perfecta para una pedida, una preboda, una postboda, para enlaces civiles y como segundos looks del día. Los encontramos en las colecciones de Immaclé, Oscar de la Renta, Rime Arodaky o Silvia Fernández Atelier y este año la tendencia se inclina por los detalles llamativos, los tejidos fastuosos, el encaje y las notas naíf. Diseños cortos, que ya llevaron con estilo muchas celebrities y que seguro la recién casada podrá reutilizar en otros muchos eventos.
El último apunte pasa por centrarse en los accesorios, porque sí, estos tienen el poder de dar un giro dramático a los estilismos nupciales. Si hablábamos del regreso de las tiaras, al más puro estilo de la realeza, este año seguiremos viendo tocados y pamelas en la cabeza, que sirven de alternativa al tradicional velo. Además y no solo en invierno, incluso en verano, los guantes y los mitones (satinados o de tul principalmente) completarán los looks más sofisticados y modernos, aquellos que nacen de la inspiración hollywoodiense, con cuerpos estrechos y tejidos fastuosos.
