Para la limpieza general, utiliza un paño limpio y húmedo para frotar suavemente las botas con movimientos delicados y circulares. «Evita empapar el cuero, ya que un exceso de humedad puede dañar su textura natural», advierte Robertson.
Para una limpieza más profunda, también puedes usar jabón suave para platos, jabón de glicerina o un limpiador de cuero. El proceso es similar: «Humedece un paño con agua jabonosa y frota la superficie», dice Estruch.
A continuación, quita un poco la humedad con una toalla limpia y deja que terminen de secar al aire, lejos del calor directo. Estruch también recomienda usar un acondicionador de cuero «para mantenerlas flexibles» (más información a continuación).
Cómo quitar las manchas de agua
Para eliminar las manchas de las botas de cuero, limpia suavemente la zona afectada con un paño húmedo y jabón suave, pero asegúrate de no empapar el cuero. «Recuerda que siempre es mejor probar primero cualquier tratamiento en una zona pequeña y poco visible», dice Robertson. «Después, deja que las botas se sequen por completo y acondiciónalas para restaurar los aceites naturales y el aspecto del cuero».
Cómo quitar las manchas de sal
Para eliminar las manchas de sal, prueba a utilizar una solución de vinagre blanco: «Mezcla partes iguales de agua y vinagre blanco, aplícalo con un paño y seca suavemente la marca hasta que desaparezca», recomienda Estruch. Si la mancha sigue ahí después de que el cuero se seque al aire, repite el proceso de nuevo.
Cómo eliminar las rozaduras
Frota suavemente las marcas de rozaduras con un paño limpio y seco o con una goma de borrar para cuero: “Puedes utilizar una goma blanca de lápiz para borrar suavemente los rayajos”, dice Estruch.
También puedes usar una goma mágica para pulir suavemente la mancha o prueba a utilizar el método del vinagre blanco descrito anteriormente.
Cómo quitar las manchas de grasa
¡Ay, la temida mancha de grasa! Le puede pasar a cualquiera en su mejores botas. Tranquillidad, porque también hay remedios caseros para eliminarlas
«Un buen truco es espolvorear maicena o polvos de talco sobre la mancha de grasa y dejar que repose toda la noche», aconseja Estruch.»Después, cepíllala por la mañana; los polvos habrán absorbido la grasa».
